Diana. Feliciano.
La piel de los hipopótamos es gruesa pero sensible a los rayos del sol y puede quemarse, por eso tienen glándulas que secretan una sustancia rojiza que les sirve como protector solar natural. Además, estar en el agua o llenar su cuerpo de lodo les ayuda a protegerla y a mantener su cuerpo fresco, pues pueden no sudar. La distribución de sus ojos, orificios nasales y orejas, en la parte superior de la cabeza, les permite estar casi totalmente dentro del agua sin dejar de respirar, ver y escuchar lo que pasa a su alrededor; si se sumergen por completo, solo pueden hacerlo durante cinco o seis minutos..- Todos los capítulos de Tantos hombres y tan poco tiempo