14 / viernes - marzo de 2008

Semana 11. 74/292
Matilde.


Mientras explicaba en clase, el premio Nóbel en 1950 Bertran Russell su teoría sobre "de una proposición falsa podía extraerse cualquier consecuencia", un alumno le interrumpió diciéndole: "¿Quiere usted decir que si aceptamos que 2+2=5, entonces podemos concluir que usted es el Papa de Roma?".

Russell contestó inmediatamente: "Mire, si 2+2=5, reste usted 2 y obtendrá que 2=3, o sea, que 3=2; y si ahora resta usted 1 a ambos miembros, obtendrá que 2=1. Puesto que el Papa y yo somos dos, y puesto que 2=1, estará usted de acuerdo conmigo en que el Papa y yo somos uno, luego yo soy, en efecto, el Papa de Roma".