31 / martes - enero de 2017

Semana 5. 31/334
Juan Bosco.

Cuenta Juan Gil en su libro 300 historias de palabras la curiosa etimología de facha, término peyorativo que se refiere a una persona reaccionaria. No tiene nada que ver con su acepción de "figura" o "aspecto". En este caso proviene del italiano faccia "cara", de donde resultaría, en español, faz o facial. Cuando se usa con intención política, es una manera coloquial de decir fascista, seguidor del movimiento fundado por Benito Mussolini después de la Primera Guerra Mundial. La palabra fascismo tiene que ver con los Fasci Italiani di Combattimento, milicias paramilitares nacidas al abrigo del partido y que eligieron como símbolo los fasci, la insignia de los cónsules romanos. Era un haz de treinta varas de olmo o abedul -una por cada curia o tribu de la antigua Roma- que se ataban ritualmente con una cinta de cuero rojo envolviendo un hacha. Estos fasci o fasces eran portados sobre el hombro por una serie de lictores -funcionarios que precedían y abrían paso a los magistrados-, como símbolo de autoridad y de su capacidad para impartir justicia. De ahí, fasces, fascismo, fascista... Y finalmente facha, término que aparece tres veces en el diccionario de la RAE con sentidos dispares. El primero se refiere a la traza o figura: "!Vaya facha!" se dice cuando alguien va inapropiadamente vestido. Un segundo significado, ya en desuso, se refería al hacha, todavía llamada en algunos lugares con efe. Y, finalmente, está su acepción ideológica, que se incorporó oficialmente al DRAE en 2001. Más curiosidades: fachar significa en Cuba "robar"; fachado o fachada es quien presenta buen aspecto; y poner un barco en facha supone colocar las velas de modo que anulen su empuje.
.- Todos los capítulos de Tantos hombres y tan poco tiempo